Nota Inicial: Sueño del 22 de Marzo
de 2009
Era domingo por la tarde en mi
sueño y yo llegaba a la iglesia
(católica), se suponía que ese día había ido a la escuela y se me hacía tarde,
no encontré a mi familia ahí pero si a M (ex novia) y su familia, llevaba un
saco naranja, pantalón de vestir verde y blusa blanca, no me hizo caso como de
costumbre.
Al entrar me encontré en el
auditorio del colegio donde estudié la preparatoria, P. G. daba se clase de coro. Él hizo cantar solo a
los chicos. Había una chica callada y hermosa en la que me interesé, no
recuerdo como era su rostro y ahora que lo pienso no estoy seguro de haberlo
visto en el sueño. Me enamoraba de ella y sabía de algún modo que ella también
estaba enamorada de mí. Me parece que en una especie de juicio su madre me
enfrentó y ella ganó, pero la chica se alejó de ella y se fue conmigo sin que
su familia pudiera hacer nada al respecto.
Saliendo a la calle de la iglesia caminábamos por la
parte del jardín y los salones, había policías (hombres y mujeres) uniformados
de forma extraña, íbamos abrazados mientras algunos policías pasaban
tranquilamente al lado de nosotros. La cabeza de mi acompañante descansaba
sobre mi hombro y su nariz estaba cerca de mi cuello, la oía y sentía respirar,
no sé si pensé o dije lo siguiente: “Lo único que se de ti es el sonido de tu
respiración en mi cuello”. Los policías que iban adelante se percataron que
estábamos atrás y nos cedieron el paso sin que lo necesitáramos, así que
apuramos el paso para no ofenderlos.
De algún modo vi el futuro de mi
sueño, o tal vez no me gustó el rumbo que tomó y lo reinventé. No recuerdo en qué
punto me di cuenta de que la luna se estaba cayendo, esto se mantuvo hasta el
final (dicha luna era la del videojuego the
legend of zelda majora's mask). La chica se veía seria y apática, yo la
acompañaba a un carro estacionado cerca del parque de la iglesia, ella subía y
yo me alejaba, al arrancarlo este explotó. Supe que la chica lo había planeado
y se había suicidado. Es aquí cuando de algún modo decidí reinventar mi sueño
como si fuera una película o videojuego donde no logras una misión y se
reinicia.
Ella parecía preocupada por la luna cayendo por lo que le
prometía que encontraría una solución, eso la tranquilizó. Nos dirigíamos al
parque de la iglesia para buscar el auto de su madre, yo sabía que explotaría
pero ella se veía más animada que la vez anterior. El vehículo ya se estaba yendo
pero lo alcanzamos, la minivan naranja opaco abrió su puerta corrediza y yo me
tiré al suelo por el miedo de perderla, ella subió pero yo grité y abrí de
nuevo la puerta antes de que se fuera, sus hermanas y madre me miraron a lo que
esta última dijo “Por qué mejor no te vas con él”, ella se bajó y dijo ”No
tiene un plan, cómo va a llevarme si no tiene nada planeado” yo busque una
solución molesto, le dije “Nos iremos en taxi”, la camioneta se fue mientras
nosotros caminábamos siguiendo su misma trayectoria, esperaba escuchar la explosión
pero esta nunca ocurrió.
Me ubicaba en una esquina donde podía ver la iglesia y la
luna a punto de chocar con el suelo, ahí me sentí victorioso y la luna, que tenía
un rostro, sonrió. Yo pensé “de que te ríes luna, yo he ganado y tú has perdido”,
y esta se estrello contra la iglesia derrumbándola y provocando un estruendo
así como una ola gigantesca de fuego. La chica me gritó molesta “no buscaste
solución a este problema, ¿cómo se te pudo haber olvidado?” yo me sentí muy mal
por defraudarla, pensé en tomarla de la mano y correr pero comprendí que sería inútil
así que solo la abracé muy fuerte sabiendo que la ola expansiva nos lanzaría
lejos, por eso la apreté con fuerza para que no nos separara. Yo le decía “te
amo, te amo aunque el cielo se quede sin luna,” y ella dijo “Te amo aunque
tenga que bajar al infierno y recorrerlo”, de algún modo eso expió mis culpas.
Escuchaba el estruendo, vi el fuego acercándose a
nosotros pero nunca nos toco, esté nos rodeaba sin causarnos daño alguno,
cuando me asomé por la esquina vi a gente mirando al cielo, un resplandor los
rodeaba, supe que solo pocos habían sido elegidos para vivir, entre ellos nosotros
dos.
Después de eso soñé despertar en mi
casa, pero su estructura y muebles no eran los de la vida real, a pesar de ello
era un lugar familiar para mí y me movía con total confianza en ese espacio, la
chica no estaba, seguí el sonido de la televisión en la habitación de una de
sus hermanas, decían que una niña que había ido de vacaciones había sobrevivido
comiendo dulces para cocodrilo, comprendí que la caída de la luna había causado
algunos estragos. Yo tenía un oso de peluche en mi mano, era de ella, en un
momento supe que estaba ausente y que la vería pronto, pero luego supe que
estaba muerta, después comprendí que el que estaba muerto era yo y de alguna
manera yo era ella. Eso me confundió y solo logre conciliar una idea, fuera
quien fuera yo y muriera quien muriera había sido una tragedia y sería muy difícil
para cualquiera.